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Para Llibreria Fabre, la Pascua es una festividad fundamental: y lo es tanto en su vertiente como tradición catalana, con la Mona de Pascua de fondo, como por la parte asociada a la cultura alemana, donde es tradición decorar y llenar todo con conejos, pollos, gallinas y huevos. Ambas tradiciones tienen un punto en común: la creatividad y la artesanía.

Relacionado con esto, en nuestra tienda puedes encontrar desde huevos de Pascua, pinturas para decorarlos, hasta figuras animales y símbolos relacionados.

Mona de Pascua: Un postre tradicional catalán

La Mona de Pascua es un postre tradicional catalán que se disfruta durante las celebraciones de Semana Santa: concretamente se regala el Lunes de Pascua, festivo en Cataluña. Se trata de un dulce decorado con figuras de chocolate, huevos y otros dulces. La Mona de Pascua, así, es un símbolo de reunión familiar y celebración; cada año se elaboran monas de todos los tamaños y diseños imaginables.

Esta tradición ha perdurado a lo largo de los siglos, arraigándose profundamente en la cultura catalana y manteniendo su relevancia hasta el día de hoy, tal y como se puede ver en Fabre.

Tras esta tradición, se esconden numerosas curiosidades. Nosotros vamos a enumerar cuatro:

• El nombre de Mona, según algunas fuentes, proviene del término árabe munna, un regalo que los moriscos entregaban a sus señores con motivo de la celebración del Aid-el-Fitr, concluido el mes del Ramadán. Otras voces, por su parte, asocian el nombre con ‘munus’, término griego que significa ‘regalo’.
• La tradición dicta que el padrino la regala al ahijado o ahijada.
• Si seguimos profundizando en sus orígenes, nos vamos a la Edad Media, cuando los huevos se regalaban como símbolos de fertilidad y renacimiento.
• Su relación con la Pascua cristiana subraya su significado religioso, mientras que su papel como regalo en la familia resalta su importancia social. La Mona de Pascua ha pasado de ser un simple dulce tradicional a convertirse en una expresión artística.

Y en Alemania, el conejito de Pascua

Nos vamos hacia Alemania, donde la Pascua se celebra de una forma igual de original: allí es tradición el conejito de Pascua, una personaje clave en el imaginario alemán.  

La historia detrás de esta tradición es la siguiente: el conejito de Pascua viene por la noche (del sábado a domingo santo) dejando los huevos, normalmente de chocolate,  en una cesta que previamente han decorado los niños, aunque también puede ser que el conejito los esconda por la casa. De esta manera, cuando los niños se despiertan el domingo de Pascua, tienen los huevos que el conejito les ha dejado.

Durante estos días de Pascua es tradición teñir los huevos. ¿Cómo? Pues los más pequeños lo hacen con huevos duros y los mayores con huevos que previamente han tenido que vaciar. Una vez teñidos los pueden decorar con calcomanías o rotuladores especiales para huevos.  

Así que si viajais a Alemania no os extrañe encontrar: huevos decorados, figuras de conejos, pollos y gallinas que dan como resultado escenas, en las casas alemanas, de una atmósfera inconfundible. Pintar los huevos es un arte y debe hacerse con el material adecuado: en Fabre, por ejemplo, contamos con tintes específicos para los huevos de Pascua.

Te animamos a que te pases por Fabre o visites nuestros perfiles sociales para que veas ideas de huevos y decoración: ¡atento a todo lo que viene!